Por su baja cantidad en agua y azucares la #mejorpatata es una patata especial para freír. Una patata que incluso una vez frita mantiene su color amarillo y no se quema gracias a su composición baja en agua y azúcares. Una patata con la que fácilmente se obtiene una textura muy crujiente por fuera y a la misma vez tierna por dentro, con un sabor no igualado por ninguna patata del mercado.
Que la #mejorpatata sea una patata especial para freír no significa que no pueda cocinarse de otras formas. Dada su extraordinaria calidad se pueden hacer perfectamente patatas al horno e incluso muchos clientes nos comentan lo ricas que les salen también en sus guisos.
La mejor forma para demostrarlo es cocinando. Como muchas de vosotras me habéis pedido la receta os diré que estas patatas al horno son de mi padre. Una receta muy sencilla con un toque especial.
Pelamos y cortamos las patatas en rodajas más o menos gordas, dependerá de nuestro gusto. Posteriormente las lavamos.
En una bandeja vamos colocando las patatas pero antes les realizamos unos pequeños cortes en la cara superior para que fácilmente se vayan introduciendo los ingredientes que se añadirán a continuación.
En lugar de especias mi padre prefiere espolvorear una pastilla de caldo de carne por todas las patatas. Para terminar le añadimos un poco perejil y de aceite de oliva por encima y ya estarán listas para introducirlas en el horno.
Horneamos a 175º-180º durante 40-45 minutos y como no todos los hornos como bien sabéis son iguales, comprobamos que están doradas para sacarlas. Finalmente emplataremos y serviremos nuestras patatas al horno con la #mejorpatata.
Espero que las disfrutéis tanto como nosotros venimos haciéndolo desde hace años.
